6 I oarsoaldea se mueve Si bien la Semana Santa no ha traído consigo la meteorología que todos hubiéramos deseado, es inevitable que la primavera empiece a traernos días agradables, cada vez más largos y calurosos. Jornadas que invitan a salir, a hacer planes y a disfrutar de lo que nuestro entorno nos ofrece. Oarsoaldea, más allá de la propuesta cultural, es un gran museo al aire libre en el que podemos disfrutar desde el mar hasta la montaña, en el que podemos gozar con el encanto de pequeñas poblaciones como San Juan o San Pedro, o disfrutar de las comodidades de una villa como Errenteria. La comarca se convierte durante la primavera en un escenario ideal para disfrutar de los distintos espacios que nos ofrece la naturaleza. Desde Jaizkibel o Peñas de Aia podemos divisar una comarca única y muy rica, pero también podemos sumergirnos en la gastronomía o darnos un chapuzón. A continuación, ofrecemos algunos planes que pueden amenizar nuestros nes de semana sin necesidad de salir de la comarca. El Faro de la Plata, un lugar único El Faro de la Plata es uno de esos lugares mágicos de la comarca. Elevado sobre el acantilado que pone n al monte Ulia, adquiere ese nombre porque las piedras areniscas sobre las que se yergue adquieren un tono plateado cuando están bañadas por el mar Cantábrico, de ahí que los marinos lo bautizaran en su día como la punta de la plata. Es un lugar de fácil acceso y que ofrece un agradable paseo desde San Pedro. Uno recorre el litoral hasta llegar a puntas y desde ahí basta con subir primero los escalones y luego el camino que nos lleva hasta uno de los lugares más espectaculares que ofrece la comarca de Oarsoaldea invita a disfrutar de la primavera Planes al aire libre. La comarca ofrece un entorno natural agradable y diverso que se puede exprimir al máximo ahora que dejamos atrás el invierno PEÑAS DE AIA, CON INFINIDAD DE CAMINOS BIEN SEÑALIZADOS, ES EL LUGAR IDEAL PARA HACER SENDERISMO LA BICICLETA ES UNA GRAN OPCIÓN Y LA RED DE BIDEGORRIS PERMITE RECORRER LA BAHÍA DE LADO A LADO Oarsoaldea. Desde ahí se puede observar toda la bocana del puerto natural de Pasaia. Kalaburtza, un pequeño oasis Justo al otro lado de la bocana, en el lado de San Juan, la playa de Kalaburtza ofrece un remanso de paz en el que es posible darse hasta un pequeño chapuzón. El paseo que nos lleva desde San Juan hasta esta zona, en la que podremos tomar el aperitivo en la cantina, es de una gran belleza. Desde allí también se puede optar por subir a Jaizkibel. En el propio San Juan (o Donibane) uno puede dar cuenta de otro de los grandes planes que nos puede ofrecer la comarca de Oarsoaldea: la gastronomía. Más allá de que cuenta con un restaurante de dos estrellas Michelin, como Mugaritz, prácticamente en cualquier rincón se puede disfrutar de la cocina más tradicional. Desde un buen pescado en cualquiera de los restaurantes de San Juan o Trintxerpe, hasta una sidrería en Errenteria u Oiartzun. Unos pintxos en el centro de Errenteria también merecen la pena y, ccómo no, los numerosos asadores que salpican el entorno de Peñas de Aia. Senderismo en Peñas de Aia El propio parque natural constituye uno de los mejores lugares para hacer senderismo de Gipuzkoa. Con un sinfín de caminos bien señalizados, se puede llegar hasta las zonas más altas de Peñas de Aia, que conforman una atalaya perfecta para visualizar no solo la comarca, sino buena parte de Gipuzkoa y la muga. Si lo que te gusta es la bicicleta, Oarsoaldea tiene una gran red de bidegorris, más allá de la propia Vía Verde de Arditurri, que te permiten, por ejemplo, recorrer la bahía de un lado al otro pedaleando y disfrutando de un buen día primaveral en Oarsoaldea.
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