Comercios guipuzcoanos

13 HONDARRIBIA Con un punto de esperanza, porque «esto es algo cíclico y en Europa la gente vuelve al barrio», Benttu Amunarriz pone el foco en el compromiso que los vecinos de Hondarribia y el resto de municipios tienen con los comercios locales: «Todos, como consumidores, debemos aportar nuestro granito de arena» Benttu Amunarriz, miembro de la asociación Amuitz, en la calle San Pedro de Hondarribia. «Como vecino, debes darte cuenta de que si no compras en tu pueblo, tu pueblo va a morir» ¿Cuál es su radiografía respecto al comercio local de Hondarribia? Todos los comerciantes que formamos parte de Amuitz queremos un comercio pequeño como el que hemos conocido todos años atrás, en nuestra infancia. Pero lo que vamos viendo es que cada vez es más complicado, mucho más, por la forma de ser y de comprar de la gente. Las nuevas generaciones compran todo en grandes superficies y por internet. Nosotros vemos que quien compra en el pequeño comercio es una población de 50 años para arriba, o incluso 60, diría yo. Todo esto nos preocupa mucho: todos los miembros de Amuitz tenemos mucha ilusión y mucho interés en vivir en un pueblo con tiendas, porque al final los pueblos los hace el comercio pequeño. Y no podemos olvidar que tenemos un comercio de muy buena calidad, que ejerce de polo de atracción para clientes de la provincia y también para aquellos que tienen una segunda vivienda aquí y aprovechan sus estancias en Hondarribia para hacer sus compras. No queremos convertirnos en un pueblo solo con bares, sobre todo nuestro caso, Hondarribia, con todo el turismo que tiene. Nuestro pueblo no se puede convertir en lo que son ahora todas las ciudades, con unas tendencias muy claras de franquicias de grandes marcas. Por ello, estamos trabajando para mantener un pueblo vivo. Pero claro, está muy complicado: nadie quiere emprender ya, nadie se atreve. Y, luego, estaría ese trabajo que tiene que hacer, cada uno en el plano individual. ¿Como comerciante o como consumidor? Tú, como vecino de tu pueblo, te tienes que dar cuenta de que si tú no compras en tu pueblo, tu pueblo va a morir. Todos echamos la culpa siempre al vecino, pero si tú no pones de tu parte para mantener vivo tu pueblo, ya sabes lo que pasará. Tenemos muchas ganas y mucho interés e invertimos mucho tiempo en pensar qué hacer, cómo hacerlo y cómo adaptarnos. ¿Qué campañas o qué iniciativas realizan desde Amuitz a lo largo del año para dinamizar sus comercios? En este aspecto, el Ayuntamiento nos ayuda un montón, nos escucha y hacemos muchas reuniones para ver qué se puede hacer. Nosotros somos una asociación relativamente joven, no llevamos mucho tiempo, pero solemos hacer campañas de Navidad, mercadillos de verano, campañas de publicidad… para que la gente compre en el pueblo. El Ayuntamiento nos ayuda para poder hacer cosas, pero al final lo importante es el boca a boca y que cada uno, dentro de su negocio, intente que la gente venga. En realidad, lo esencial es que al comercio pequeño venga la gente y se sienta a gusto, que vea tus productos, que hable contigo, que vaya a tu casa. Esa es nuestra misión: hacemos que la gente se sienta cómoda. ¿Qué retos detectan? Muchos. Siempre está el problema del aparcamiento, porque todos queremos aparcar enfrente para comprar. Se le pide a la gente que se mueva en bicicleta, pero no siempre puedes ir a hacer la compra en ella, más aún en Hondarribia, con la media de edad que tiene nuestra clientela. Entonces, nos centramos en repartir las compras a domicilio, les facilitamos mucho las cosas. Hay muchas tiendas también que tienen página web y venden por internet, pero debemos intentar que la gente de nuestro pueblo compre en nuestras tiendas. Siempre debemos intentar que la gente se sienta cómoda y que venga a tu tienda, que no se tenga que ir a una gran superficie a comprar. Nosotros detectamos esos retos e intentamos ponerles solución. Creo que los comerciantes nos estamos adaptando a esa nueva forma de comprar que tiene la gente y, por ejemplo, realizamos cursos para formarnos en nuevas tecnologías. ¿Cuál es su relación con el turismo? ¿El turista apuesta por el comercio local? La gente se queja mucho de que el turismo que viene no compra. La gente que viene a Hondarribia porque vive en otros municipios y tiene aquí una segunda vivienda sí que gasta, pero las tiendas de ropa o zapaterías se quejan de que el turismo tampoco deja mucho dinero. Y la solución no pasa, por ejemplo, por abrir en domingo. Aquí se da una economía circular, porque el que gasta es el de casa y lo que queremos es no perder a quien gasta. La gente de cierta edad tiene un poder adquisitivo más alto y ya no le compensa ir a otros lugares a comprar, lo hacen en casa. Por eso, lo que queremos ahora es la gente más joven. ¿Cuál es la solución? Sinceramente, creo que con el relevo generacional no podemos ser muy optimistas, pero estamos en ello. También creo que, en general, la población no hace ese esfuerzo personal de cada uno en algo en lo que todo el mundo tiene que colaborar. Esto son ciclos, y en otros países de Europa, la gente ya no va a las grandes superficies, la gente vuelve al barrio, a las tiendas pequeñas. Entonces, tenemos que pasar el trance e intentar que se dé ese cambio de mentalidad y podamos recuperar a la gente. Ese es el trabajo realmente, que la gente compre en tiendas pequeñas. Si nosotros, como consumidores, no ponemos nuestro granito de arena… Entiendo que el poder adquisitivo para las familias no es el mismo, pero no entiendo comprar una crema en esa cadena de supermercados que todos conocemos y cuyo dueño ha dicho que en ocho años no habrá pequeño comercio, cuando en la farmacia de tu barrio vale un euro más. Hay que comprar en la farmacia. HONDARRIBIKO MERKATARIAK AMUITZ benttu amunarriz Miembro de Hondarribiko Merkatariak Amuitz «LO ESENCIAL ES QUE AL COMERCIO PEQUEÑO VENGA LA GENTE Y SE SIENTA A GUSTO, QUE VEA TUS PRODUCTOS, QUE HABLE CONTIGO, QUE VAYA A TU CASA» «AQUÍ SE DA UNA ECONOMÍA CIRCULAR, PORQUE EL QUE GASTA ES EL DE CASA Y LO QUE QUEREMOS ES NO PERDER A QUIEN GASTA»

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc0NTQ0