10 CON LA EMPRESA GUIPUZCOANA cable de empresas de nivel tecnológico medio-alto. Esto nos permite contar con buenos empleos, ser uno de los territorios de Europa con mayor equilibrio de rentas y menor desigualdad, como se ve en el índice GINI, y mantener a su vez unas políticas sociales para poder avanzar todos juntos. Sobre esas bases tenemos que seguir construyendo. ¿Y cuáles son las debilidades? Somos un territorio y un país pequeños compitiendo a nivel global. Con un tejido económico formado casi en su totalidad por pequeñas y medianas empresas, más pequeñas que medianas. El 60 % del empleo se concentra en empresas de 50 trabajadores o menos. Esta realidad nos diferencia de otras economías avanzadas, como la alemana, y supone un condicionante importante. Favorece la flexibilidad y, de hecho, muchas de nuestras empresas han hecho de esa desventaja virtud y han sabido encontrar su hueco, en un ejercicio de resiliencia encomiable. Pero necesitamos que las compañías crezcan, porque sin duda es un factor esencial de competitividad. ¿En qué afecta? En muchos ámbitos. Las empresas con mayor tamaño tienen acceso a economías de escala y financiación, más medios para atraer talento, para invertir en I+D y para afrontar con garantías las grandes transformaciones de este nuevo tiempo. Tienen más facilidades para, básicamente, levantar la mirada del día a día y pensar y actuar a largo. ¿Cuáles son los principales retos de nuestras pymes actualmente? Recientemente hemos organizado la tercera edición de la jornada Re-think Industry, con la que precisamente buscamos que las personas con responsabilidades en nuestras empresas puedan conocer las buenas prácticas y las experiencias de distintas pymes del territorio ligadas a esos retos, compartiendo conocimiento y trababando en red. La jornada se estructuró en mesas sobre cuatro grandes retos que habíamos identificado junto a los agentes económicos y empresas de Gipuzkoa: la transformación digital, la sostenibilidad, los procesos de sucesión y el crecimiento de los proyectos. No son los únicos pero sí, sin duda, algunos de los más importantes. Ane Insausti, diputada de Promoción Económica y Proyectos Estratégicos, hace hincapié en la necesidad de seguir cimentando la competitividad del territorio sobre valores como «la colaboración y la innovación» y el binomio «tecnología-personas». Además, destaca que, «en un momento de transformaciones, en el que Europa está volcada en fortalecer su protagonismo económico a nivel global y recuperar su pujanza industrial, desde Gipuzkoa y Euskadi tenemos mucho que aportar, con humildad, pero con confianza en nuestras capacidades». ¿Qué papel cobran las políticas de impulso a la actividad económica para la Diputación Foral esta legislatura? Un papel muy relevante. Después de un amplio proceso de contraste con agentes sociales y económicos, en la primera mitad de este año aprobamos el Plan Estratégico, donde definimos una hoja de ruta para afrontar los retos de futuro. La promoción económica es uno de los cuatro grandes pilares de ese plan, y una herramienta clave para conseguir ese bienestar integral que es el gran objetivo común del Plan. Apostamos por una economía competitiva, innovadora y sostenible, que siga ofreciendo oportunidades para el desarrollo de proyectos con futuro, plenos y con sentido a todas las personas. ¿Qué mimbres tiene Gipuzkoa para hacer realidad esa visión? Resumiendo mucho, destacaría tres fortalezas: nuestro ADN industrial, nuestro buen posicionamiento en sectores de alto valor añadido y nuestra visión a largo plazo. Tenemos un porcentaje destaLa diputada de Promoción Económica y Proyectos Estratégicos, Ane Insausti, pone de relieve la aportación del tejido económico, en general, y de las pymes, en particular, «al desarrollo y al bienestar» de Gipuzkoa ANE INSAUSTI Diputada de Promoción Económica y Proyectos Estratégicos «La vocación de la Diputación es acompañar a la pyme de Gipuzkoa en su camino transformador» DIPUTACIÓN FORAL DE GIPUZKOA
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